Desde el lunes 10 de mayo, el Hospital San Vicente decidió trasladar al equipo de kinesiología motora a la sede social de la población Nueva Esperanza, lo que ha permitido aumentar la cantidad de prestaciones, siempre tomando todos los resguardos necesarios para evitar contagios entre usuarios y funcionarios.  

Este tremendo avance ha permitido, a la fecha, entregar más de 900 prestaciones a usuarios de la comuna, un número alentador, pues cuando inicio la pandemia, los profesionales del área kinesiológica debieron ceder sus instalaciones a la urgencia no respiratoria y disminuir sus atenciones diarias.

“Este lugar fue adecuado con los más altos estándares de bioseguridad. Disponemos de alcohol gel, distanciamiento entre las personas, un personal que nos ayuda constantemente a limpiar, permitiendo así entregar un rehabilitación segura y de calidad a todos nuestros usuarios”, destacó David Núñez Morales, kinesiólogo de la unidad.

El equipo entrega importantes prestaciones y el trabajo que realiza se realiza diariamente es fundamental para el buen funcionamiento del cuerpo humano, principalmente “del miembro superior, columna, miembro inferior, problemas de tendinopatía, problemas musculares o de ligamentos”, enfatizó Emilio Velásquez Cerpa, kinesiólogo del equipo.

 Desde la comunidad destacaron las nuevas instalaciones y el trabajo del equipo de salud, pues “a pesar de estar en pandemia tuve la suerte de llegar a este buen lugar y espacioso que me ha permitido mejorar mi estado de salud”, agradeció Humberto Sanhueza Muñoz, usuario de Arauco.

El Hospital San Vicente, continúa trabajando por acercar la salud a la comunidad, retomando sus prestaciones de manera presencial, preocupados por recuperar el tiempo  y entregar las atenciones que los usuarios necesitan.